Pues no podía ser de otra forma, claro. Han aparecido los temidos problemas de sincronización. Y es que resulta que ahora el público parece estar excesivamente animados. Vamos, que parecen sacados de una película muda.
Eso es debido básicamente a que la velocidad de la animación de la composición de los personajes del público es un poco superior a la velocidad asiganada al vídeo. La primera parece que lleva un rate de 29fps y la segunda de 25fps… sin embargo en los primeros test todo parece correcto. Y ambos archivos llevan sincronía a 25fps.
Ummm ¿será un efecto óptico?. Puede que sí, pero habrá que solucionarlo o habrá cachondeo no por lo que toca sino por lo cutre que puede quedar.
Arriba podéis apreciar una nuevamente dónde se está fraguando realmente todo el invento. En una mesa de apenas metro sesenta (sí, la acabo de medir)