No es que nos estuviéramos escondiendo mucho, la verdad, pero esta ha sido una pillada en toda regla.

En el penúltimo día programado de grabación (antepenúltimo, en verdad) aprovechando el momento de una fiesta en el colegio, hemos quedado con bastante gente y nos hemos quitado 8 minutos del making que se quedarán en poco más de un minuto, pero ha merecido la pena.

Finalmente ya he comunicado (con lo cual se ha hecho oficial) el final extremo que tengo pensado llevar a cabo… bueno, no he contado los detalles de lo que tengo en la cabeza, pero sí el trazo grueso. Estará sí o sí a tiempo. Prometido.